Desde que la pasada semana se anunciara la probable fusión de Caixa Catalunya con otras dos entidades financieras, está cundiendo un clima de desconcierto entre los empleados que no beneficia a nadie. El habitual silencio de la empresa facilita la creación de un caldo de cultivo ideal para todo tipo de rumores. Creemos que una noticia de este calibre merece un trato más cuidadoso.
Nos consta que en alguna área, aunque informalmente, se ha explicado la situación a los empleados. Aunque sólo haya sido para decir que no se sabe nada, no podemos por menos que elogiar esta medida en tanto que trata de evitar la sensación de desamparo en el empleado. Lástima que no cunda el ejemplo, ni que sea por correo electrónico, pero ya se sabe; cada uno tiene su sensibilidad.
Por nuestra parte, el mismo día en que apareció la noticia solicitamos una reunión con la empresa. Se nos ha emplazado a hablar de las posibles repercusiones hacia mediados de Noviembre, aduciendo que ahora es prematuro y a la espera de que por aquel entonces haya un poco más de luz en todo el asunto. Así las cosas, seguimos sin saber nada.
La verdad es que nos cuesta creer que un asunto de esta magnitud no se haya abordado todavía en su vertiente informática; pero hemos de creer en la buena fe de todos.
Aprovechamos para emplazaros a hacernos llegar cualquier inquietud que tengáis sobre este tema al objeto de incorporarla, en la medida de lo posible, en la relación de cuestiones que pongamos sobre la mesa en la reunión.
Hasta entonces, seamos cautos. Los objetivos son claros: conservar todos los puestos de trabajo, mantener la ubicación del centro de trabajo y evitar abusos en las horas extras.
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