A día de hoy hay uno o varios
proyectos que están requiriendo la realización de un número notable de horas
extras y nos consta que a algún que otro compañero se le está mandando que
reporte un número inferior al realmente realizado.
A priori, sin conocer las particularidades de cada caso, es feo regatear el esfuerzo de un compañero. Es por ello que quisiéramos recordaros que hay un procedimiento estandarizado para imputar las horas extras y que éstas sean compensadas según marca nuesto convenio. Si mi responsable me exige recortes y encima éstos me parecen abusivos, la solución es simple. Si un señor me ofrece 80 por un televisor que considero que vale 100, pues el señor se queda sin televisor. Teniendo este camino, lo que no es aconsejable es aceptar los 80 y hacerme mala sangre por ello.
Por otra parte, no entendemos que exista algún proyecto donde se esté apretando tanto a los compañeros en vez de destinarle los recursos necesarios.
A priori, sin conocer las particularidades de cada caso, es feo regatear el esfuerzo de un compañero. Es por ello que quisiéramos recordaros que hay un procedimiento estandarizado para imputar las horas extras y que éstas sean compensadas según marca nuesto convenio. Si mi responsable me exige recortes y encima éstos me parecen abusivos, la solución es simple. Si un señor me ofrece 80 por un televisor que considero que vale 100, pues el señor se queda sin televisor. Teniendo este camino, lo que no es aconsejable es aceptar los 80 y hacerme mala sangre por ello.
Por otra parte, no entendemos que exista algún proyecto donde se esté apretando tanto a los compañeros en vez de destinarle los recursos necesarios.
La sección sindical de COMFIA en ITC.